El inicio del presente semestre estuvo inaugurado por la bienvenida a la clase de activación de marca, con una propuesta retadora: Gestar una idea creativa que llegara a beneficiar a Diana Laguna, una mujer valiente, perteneciente a la comunidad tadeísta, que ha sobrellevado la enfermedad huérfana en la sangre con la que sus dos hijas viven. Empezó la tarea de crear un mecanismo que resultara memorable tanto para el target al que nos dirigíamos como para Diana.
El fútbol profesional es una actividad que mueve masas y Bogotá no es una ciudad que esté exenta de ello; por eso Isabella Guerrero, Laura Joya, Tatiana Vega, María Fernanda Mahecha, Cindy Castillo y Kelly Archila, quisieron traer a un personaje que ha sido ovacionado cientos de veces por los “embajadores" desde las tribunas, por su trabajo en la portería, por eso, después de una extensiva indagación se tomó como concepto “La pasión” que un hincha siente por su equipo, a partir de esto, se construyó la campaña.
La fecha tan esperada llegó, el lugar designado fue el hemiciclo de la UTadeo, el ingreso de la hinchada se dió a la hora planeada 12:00 m, el color azul invadió este auditorio, Nicolás Vikonis no se hizo esperar, ingresó ante sus hinchas con la gran sonrisa que lo caracteriza y fue recibido con un canto de agradecimiento en su honor, sus palabras llegaron pronto, donde destacó el trabajo de la universidad, incentivando los proyectos con fines sociales.
Después de la premiación de los sorteos, llegó el momento más ansiado por los hinchas, la firma y fotografía del ídolo embajador -se tenía estipulado la firma de un solo objeto- pero nuevamente Nicolás Vikonis sorprendió a su fanaticada azul, permitiendo cualquier número de objetos por firmar.
Finalizando el evento, las palabras de Diana Laguna creaban una gran expectativa, adicional a esto, la presencia de Juanita su hija impactó a todos los presentes, quien logró que la multitud coreara un canto de fuerza hacia ella. Nuevamente el invitado estrella de la jornada se hizo notorio con la donación de un millón de pesos más, para contribuir con la causa, hecho que logró la euforia de los asistentes y reiteradamente se escuchó el canto “Uruguayo, uruguayo”, con esto se dió por finalizado el evento.
Posiblemente no sea el final de “Los sacamos del estadio”, el propósito fue realizar la actividad con los equipos capitalinos, y existe esta deuda con la hinchada cardenal.
Se quiere creer que se ha hecho más que un evento para la universidad, más que una reunión de hinchas y un jugador, más que la entrega de un cheque, se ha puesto un punto en la cima de la publicidad social, para que los estudiantes venideros, tomando como ejemplo esto, la sigan sacando del estadio.
