Podemos apreciar parte del trabajo de Ruven Afanador en cuatro libros, donde la singularidad de su genio artístico, su estética y el erotismo que la subraya, se hacen evidentes de manera espectacular:
Torero (Stemmle, 2001). Colección de retratos en blanco y negro de matadores de España, México, Colombia y Perú, con prólogo de Héctor Abad Faciolince. En este libro Afanador define su estilo como retratista, volcando su admiración por la belleza masculina y aplicando las convenciones de la fotografía de la alta costura, a la mezcla de audacia varonil y fuerza femenina que son peculiares al torero.
Sombra (Merrell, 2004), su segundo libro, con prólogo de Jean Paul Gaultier, profundiza ese estilo retratando desnudos masculinos en poses inspiradas por los gestos y el movimiento del ballet clásico, empleando técnicas fotográficas del siglo diecinueve.
Mil Besos (Rizzoli, 2009), con prólogo de John Galliano, celebra las mujeres del flamenco en un mundo de sol y sombra, y rinde homenaje a la tradición romántica de la cultura española, retando definiciones de género y belleza.
Ángel Gitano, “Hay una conexión muy especial con la danza, con España y con esa alma andaluz”, y agrega que “cada uno de los modelos saben cuánto los amo, admiro y respeto sus carreras”, palabras de Afanador.
Asista al Conversatorio de Ruven Afanador en el Auditorio Fabio Lozano Utadeo el próximo 3 de marzo.
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