Día Nacional de la Memoria, #LasVictimasCuentan
Yovana es la directora de la Fundación Nacional de Defensoras de Derechos Humanos de Mujeres Víctimas de Violencia Sexual –Dhefensoras- y fue abusada sexualmente.
No le tiembla la voz ni agacha la mirada al decirlo. Ella y las más de 800 mujeres que hacen parte de la Fundación se cansaron de ocultarlo, de sentir vergüenza.
“Todas las que pertenecemos a Dhefensoras somos víctimas de violencia sexual. Creemos que la violencia sexual no la puede hablar alguien que no la haya sufrido”.
Por esta razón, Yovana es la primera en alzar la voz: “la violencia sexual es un delito que te marca toda la vida, que nunca se olvida. Las víctimas no tenemos por qué agachar el rostro, tenemos que levantar la cabeza y decir que sí nos pasó”.
Yovana Saenz - Directora Dhefensoras
De eso se trató la jornada, de escuchar lo que las víctimas tienen por contar. Con este objetivo, más de 70 víctimas se reunieron en diferentes puntos de la capital para contar su historia, para recordar que el conflicto armado colombiano nos tocó a todos de una u otra manera y que es nuestro deber nunca olvidar.
“Lo que no se recuerda se olvida y es importante recordar porque estas cosas sí están pasando en nuestros territorios, pasa en Colombia y en especial con las mujeres”, afirma Saenz.
Esta actividad hizo parte de la conmemoración hecha por el Distrito en el Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas del Conflicto, llevada a cabo el 9 de abril. Como parte de la conmemoración se recordó el magnicidio de Jorge Eliecer Gaitán hace 70 años.
Como si fuera a través de un megáfono, la voz de Yovana se escuchó en el Teatro Jorge Eliecer Gaitán, donde a su vez reposaron decenas de cartas escritas por estudiantes del programa de Estudios Literarios y Edición de Utadeo, que se dirigían a las víctimas, a los desmovilizados y a todas las personas que han sufrido en carne propia la violencia, y les mostraban su apoyo.
En esta estación, que fue la segunda propuesta en el recorrido que iba desde el Planetario de Bogotá hasta la Plaza Simón Bolívar, el grupo Orientar Tadeísta, estudiantes del programa de Artes Plásticas y Bienestar Universitario estamparon camisetas con la flor Nomeolvides, símbolo de la resistencia de las víctimas ante las adversidades.