El 'klimatbutik' es una tienda emergente lanzada por la marca de alimentos sueca Felix donde los precios de los artículos se basan en su huella de carbono. Los clientes tienen un presupuesto de carbono semanal de 18,6 kg, que les muestra, de forma muy práctica, cuál es el coste medioambiental de sus compras. Mientras tanto, los productos Felix que se venden en otros lugares también están etiquetados con una escala de impacto climático. No solo las marcas de alimentos, sino también los restaurantes y las marcas de moda están adoptando cada vez más el etiquetado de carbono para educar a los consumidores sobre los costos ocultos de los productos mientras obtienen una nueva ventaja competitiva.
INFORME DE CAMILA D'ALEMAN