Investigación sobre rastros de plaguicidas en tomates fue reseñada por El Tiempo
Aproximadamente el 70% de los tomates que se consumen en Bogotá tendrían rastros de plaguicidas. Así lo demuestra el estudio que, desde el 2010, adelantan un grupo de investigadores de Utadeo, liderados por Luis Alejandro Arias, director de los programas de Ciencias Biológicas y Ambientales, quienes han estudiado de cerca la presencia de algunos compuestos químicos en muestras de tomate que se vende en Bogotá, así como los que se cultivan en los departamentos de Santander y Boyacá. La investigación fue publicada inicialmente en Expeditio, y posteriormente, replicada en la sección Actualidad de El Tiempo.
De acuerdo con el medio, en un primer momento Arias analizó 400 muestras de tomate de tiendas y supermercados de 187 barrios de la capital colombiana, encontrando que el 25% de la muestra superaba los límites máximos permitidos por los organismos internacionales.
En cuanto al análisis de los cultivos en Santander y Boyacá, se encontró que el primer departamento cuenta con una mayor parte de plaguicidas en suelos, debido en parte a los usos diversos de cultivo que se le dan a este. Por su parte, el segundo departamento hace un mayor uso de biocontroladores.
Otro de los estudios adelantados afirman que, en promedio, los agricultores aplican cerca de 130 partículas de plaguicidas, de las cuales cerca de treinta se encontraron en los frutos: “uno de los aspectos que más preocupa es que, en varios casos, las muestras superan, en la detección para diez productos químicos, veinte veces los límites establecidos por las autoridades”, destaca el medio.
