Germán Prieto opinó para El Espectador sobre la nueva flota de buses de Transmilenio
Dentro de los cambios que ofrece la nueva flota de buses de Transmilenio, son motores más amigables con el medioambiente que los anteriores, cámaras de seguridad y sillas mejor dispuestas para que quepan más usuarios. Aunque estos buses vienen a mejorar las condiciones del sistema, los usuarios ya han reportado incidentes con ellos.
En el caso de los buses biarticulados, no todas las estaciones están adaptadas para recibirlos, por lo que se han presentado situaciones en las que el tercer vagón no queda alineado con una puerta, por lo que las personas deben desplazarse hasta otro vagón, para poder subir o bajarse del bus.
Para Germán Prieto, profesor de la Especialización en Gerencia Financiera de Utadeo, “las críticas son un poco injustas, porque son casos aislados que ocurren en uno de más de 300 buses. Lo que creo es que puede haber un desperdicio si no adaptan las estaciones a los buses. Se debe acelerar la adecuación.”
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