“Solo el 39.7 % de las personas que se gradúan del colegio ingresan a una Institución de Educación Superior. Y solo la mitad de este porcentaje puede acceder a una universidad privada” fueron las palabras de la graduanda Gabriela Romero Nempeque, de la primera promoción de Estudios Literarios y Edición, quien durante la ceremonia de graduación se dirigió a sus compañeros, familiares y docentes.
Esta cifra, a pesar de ser negativa para el país, deja ver el privilegio que tienen algunos no solo de llegar a la universidad, sino de culminar sus estudios y empezar esa vida profesional que, sin duda alguna, contribuye al desarrollo de las sociedades.
De ahí que es motivo de celebración que en la Universidad Jorge Tadeo Lozano, estudiantes de las facultades de Ciencias Naturales e Ingeniería, Ciencias Sociales, Artes y Diseño y Ciencias Económicas y Administrativas, recibieran su título profesional y culminaran una etapa que estuvo marcada por dos años de aprendizaje a través de la virtualidad y esos retos que presentó la pandemia.
El escenario de los grados fue el Auditorio Fabio Lozano, en donde se realizaron cuatro ceremonias en las cuales 624 personas, aproximadamente, recibieron su título profesional. Todos iban de fiesta y con sus trajes impecables para empezar una nueva etapa: la profesional, que tantos retos presenta y a su vez ofrece la oportunidad de ser actores que ayuden a la sociedad.
Carlos Sánchez Gaitán, Rector de la Universidad, en sus palabras dijo a los estudiantes que: “en su condición de nuevos profesionales en estos periodos de crisis y cambio, donde se requiere el concurso de saberes y compromisos morales están llamados a asumir retos, compromisos y trasformaciones que busquen reducir las brechas de equidad, que propendan por mayor igualdad y jalonen el desarrollo tanto del país. Así que bienvenidas todas sus ideas, queridos graduandos, hay mucho trabajo por delante. No queda más que felicitarlos por este gran logro que hoy obtienen en nuestra querida universidad”.
Logros que se dan en equipo porque si bien los estudiantes asisten a sus clases y cumplen con sus compromisos, hay padres, familiares y amigos que también contribuyen en ese triunfo. Eso se pudo evidenciar en las trasmisiones que se realizaron en vivo, donde los buenos deseos, las felicitaciones y reacciones de "me gusta" fueron las protagonistas, y claro que no es para menos ya que detrás de cada persona hay una historia de tenacidad, esfuerzo y perseverancia.
“Para mí es un logro muy importante y más cuando lo sacamos adelante con las uñas ya que el tema económico en mi hogar fue complejo. Acudimos a préstamos, matricular pocas materias y en ocasiones aplazar semestres. Me demoré 8 años en terminar y por eso hoy estoy muy feliz y celebro con mi familia que fue un apoyo determinante. Ahora el camino es trabajar poder formar mi hogar, tener mi casa y viajar, eso lo he soñado” dijo Juan Camilo Estrada Rodríguez, graduado de Diseño Gráfico.
Los sueños en su tiempo se vuelven realidad y se va completando ese rompecabezas que la vida plantea con sus respectivos retos. Lo importante de estos nuevos retos es poner en valor los conocimientos adquiridos a lo largo de la carrea. Como lo señaló Christian Schrader, director del Programa de Publicidad “ustedes ya tienen en el equipaje los conocimientos que les permitirán desarrollar buenos proyectos para hacer realidad los planes que se gestaron durante la época universitaria”.
Esos planes que estarán en constante cambio y que requieren de valentía y dedicación para sacarlos adelante y poder ayudar a otros y generar desarrollo. “Nosotros somos desplazados de la violencia. Yo no pude estudiar, mi realidad fue la guerra. Pero hoy celebro con mi hija que se gradúa en Gestión de la Moda y sin duda es inspiración no solo para la familia sino para aquellos que pueden leer esta nota porque cuando llegamos a la ciudad lo que recibimos fue desprecio y fue duro salir adelante”, señala Luis Alfredo Cipriano.
La educación permite crear nuevas realidades y trabajar por un mejor futuro. No se es el mismo cuando se tiene la oportunidad de acceder al conocimiento y menos cuando se es sensible a las necesidades que el mundo reclama. Por eso, “quienes reciben hoy este título y han elegido el camino de la literatura, de las artes, de las ciencias sociales reciben un legado enorme de nuestras manos: llevar al mundo la comprensión, la imaginación liberada, el placer de saber y el deseo de ser libres en un mundo libre”, aseguró Mario Alejandro Molano, Decano de la Facultad de Ciencias Sociales, quien destacó a la primera promoción del programa de Estudios Literarios y Edición.
Ese deseo de ser libres es un movilizador, además, para que los nuevos profesionales se reten y den lo mejor en un mundo globalizado con infinitas oportunidades. Las ceremonias de grado estuvieron marcadas por la emotividad y sentimientos encontrados. Es la alegría de dar ese gran paso a la vida profesional, pero también la nostalgia de dejar un lugar en el que se ha sido feliz. Así lo señaló Karen Holguín, graduanda del programa de Comercio internacional y finanzas, “extrañaré mucho la universidad, me gusta mucho. En la pandemia estuvieron acompañándonos en el proceso y nunca nos dejaron solos. La verdad me hubiera gustado disfrutar más del campus y toda su oferta cultural y de bienestar, pero será en otro momento”.
Aunque graduarse es el cierre de un ciclo, el aprendizaje a lo largo de la vida es casi que obligatorio. Por eso, la universidad hizo un llamado para mantener la relación con la institución e incluso poder pensar en un programa de posgrado. “Yo quiero seguir con mis estudios posgraduales, seguir aprendiendo y por supuesto disfrutar de este logro porque para mí significa tener independencia y contar con herramientas sólidas para asegurar mi futuro”, recalca Zharik Jácome, diseñadora gráfica, quien estudió gracias a la beca de Ser Pilo Paga y reconoce que el esfuerzo y la excelencia traen buenos resultados.
La hoja de ruta para muchos ya está trazada y para otros será una aventura que se descubra en el camino y como bien dice Serrat en su canción “caminante no hay camino, se hace camino al andar”. “Ya estoy vinculada laboralmente en una empresa de Moda. Siento una profunda felicidad de empezar mi vida laboral, adquirir experiencia y dejar en alto el nombre de mi universidad”, dice Mariana Suárez, quien recibe el grado en Diseño y Gestión de la Moda, un título que comparte con su mamá Sandra Rodríguez, egresada de la universidad. “Soy tadeísta, soy del programa de diseño y me siento muy contenta del gran logro de mi hija y su paso por mi alma máter”.
En estos links se pueden descargar las fotos de los graduados: