Con el objetivo de estrechar los lazos entre la Universidad y la comunidad estudiantil, la Resolución 032 del 19 de noviembre de 2015 otorgó el reconocimiento al Consejo Estudiantil Tadeísta (CET) como un organismo encargado de facilitar el diálogo entre los estudiantes y los diversos estamentos de la institución, según las directrices de la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano.
El período actual del CET -que se inició en 2021-1- está compuesto por 25 representantes estudiantiles de todas las facultades, cuya función es promover la proximidad y representación de la comunidad estudiantil en la universidad. Con el propósito de liderar y organizarse eficazmente, el CET ha establecido una junta directiva que incluye roles clave como la presidencia, la secretaría general, la tesorería, la coordinación académica, la coordinación disciplinaria y la coordinación de comunicaciones.
Es esta junta directiva la responsable de coordinar y guiar a los demás representantes. "Al comenzar nuestro mandato, notamos que solo existía mi cargo, el de presidenta. Sin embargo, al revisar nuestros estatutos, identificamos otras funciones que podían ser necesarias. Por lo tanto, decidimos organizar nuestra junta directiva siguiendo las pautas establecidas en los estatutos, con el fin de trabajar de manera colaborativa y permitir que cada representante se enfoque en aspectos más específicos para alcanzar nuestros objetivos", afirmó Nicoll Saldaña, presidenta del CET para el período 2022-2 al 2024-1.
De acuerdo con el Estatuto del Consejo Estudiantil Tadeísta, su misión es "promover la participación estudiantil, la democracia universitaria, el progreso de la universidad, el respeto de los derechos y responsabilidades de los estudiantes, y el bienestar de toda la comunidad universitaria".
Una de las primeras acciones emprendidas por el CET fue la consolidación de su equipo de trabajo y la creación de un espacio donde los estudiantes puedan reunirse para discutir temas pendientes, expresar sus necesidades y sugerencias, y sentirse escuchados y seguros.
Nicoll, en su rol como presidenta, señaló uno de los desafíos iniciales al asumir su cargo: "Uno de nuestros primeros y mayores logros fue ampliar la participación de representantes de diversas carreras, con el objetivo de garantizar una representación más completa. Al comenzar nuestro período, solo teníamos representación en alrededor de 6 carreras, pero ahora contamos con 25 representantes. Aunque aún falta representación en algunas carreras, al menos todas las facultades cuentan con algún representante".
Juan Pablo Cruz, estudiante de arquitectura y actual secretario general del CET, destacó su compromiso en apoyar las asambleas estudiantiles y lograr una asistencia completa para que cada sesión de trabajo pueda contar con la participación de todos los representantes. "En este momento, tenemos dos tipos de asambleas: una exclusiva para representantes, que se lleva a cabo unas 2 veces al mes, y otra en la que también participan las autoridades universitarias. Esto nos ha permitido involucrar cada vez más a los representantes y lograr avances significativos", afirmó.
Otro objetivo importante de la junta directiva actual es brindar apoyo, compañía y orientación a los estudiantes que han experimentado situaciones de violencia o se han sentido marginados dentro de la universidad. "Actualmente, los estudiantes no siempre saben a quién recurrir o con quién hablar. Queremos ser un mecanismo de apoyo y guía para aquellos estudiantes que enfrentan estas situaciones. También deseamos dar voz a quienes se sienten insatisfechos, ya que, como representantes, somos el vínculo y el canal para que sus problemas sean discutidos en los niveles superiores con las autoridades", expresó Sara Mena, estudiante de Comunicación Social y Periodismo y miembro del CET.
El objetivo principal de este grupo que lidera el Consejo Estudiantil Tadeísta es dar voz a aquellos estudiantes que a menudo no la tienen, representando a la minoría y promoviendo una mayor visibilidad. María José Rojas, estudiante de Estudios Literarios y Edición y coordinadora de comunicaciones, afirmó que su enfoque es destacar no solo a la junta directiva, sino a los 25 estudiantes que conforman el CET. Según María José, esto es esencial para lograr una mayor visibilidad y promover un cambio efectivo. "Nuestros objetivos de comunicación se centran en tres aspectos: primero, informar a los estudiantes sobre quiénes somos como representantes para que nos reconozcan y se acerquen a nosotros; segundo, motivar a otros estudiantes a participar en estos espacios de representación, porque si deseamos un cambio, debemos comenzar por nosotros mismos; y tercero, respaldar y destacar los avances realizados por la universidad para su continuo crecimiento".
En resumen, el consejo directivo del CET se compromete no solo a facilitar la comunicación entre los estudiantes y los directivos universitarios, sino también a establecer una ruta de trabajo clara y a fomentar la participación estudiantil. Desde sus respectivos roles, creen en la fortaleza y sostenibilidad de esta estructura, que permite una mayor coordinación entre todos los involucrados.
La Junta Directiva se compone de la siguiente manera:
