Esta investigación, de naturaleza a la vez analítica (investigación) y normativa (acción), aborda el problema de la gobernanza territorial fijando su interés en el período de transición sociopolítica y económica de Colombia, reconocido como “posconflicto”, que tiene lugar en los territorios donde prevalece la actividad Agro, específicamente en Pequeños Municipios. El escenario de estudio es el departamento del Tolima contrastando municipios de dos regiones geográficas diferentes y dos actividades económicas Agro diferenciables por sus atributos; en un proceso de selección con actores estratégicos territoriales se eligieron los municipios de Piedras y Saldaña como territorios arroceros y Fresno y Cajamarca como territorios productores de aguacate.
El análisis se aborda desde la perspectiva neoinstitucional y concretamente desde la relación entre costos de transacción y gobernanza. La combinación de la gobernanza económica (teoría de los costos de transacción) con la gobernanza territorial (coordinación de actores estratégicos) constituye la base normativa, en cuanto permite hacer una mirada de lo público desde elementos de la economía y, en este caso, desde la especificidad de los activos Agro como un “dispositivo” analítico que hace más complejo el manejo de la incertidumbre en sus propios territorios.
Tres preguntas orientadoras formula el proyecto: ¿Cómo y por qué los atributos de una actividad económica contribuyen al diseño y a la calidad de la gobernanza en un territorio? ¿Cómo determinar este efecto? ¿Qué innovaciones resultarían más convenientes para una mejor capacidad de acción pública territorial?
La investigación se organizó en cuatro componentes robustos de trabajo: El primero, es el Estudio de Contexto Agroterritorial – ECAT. Estos estudios de contexto agroterritoriales constituyen una primera aproximación a la realidad en la cual se desenvuelven tanto sectores como territorios a partir de la información encontrada sobre sus atributos, antecedentes, interacciones y tensiones fundamentales. Esta parte de la investigación es un trabajo continuo en respuesta al carácter dinámico y variable de la realidad, desarrollándose hasta al final de la investigación.
El segundo es, un Referencial de Política Pública Agroterritorial que a la manera de Muller (2010) es necesario a construir y que consiste en una imagen de la realidad nueva y posible que les permita a los actores estratégicos organizar, en cada territorio, la percepción del problema, confrontar sus soluciones y definir sus propuestas de acción para, a la vez, reducir la incertidumbre y desarrollar las oportunidades. El Referencial está organizado en una perspectiva de desarrollo territorial que plantea la necesidad de compatibilizar tres modelos, de lógicas diferentes pero interrelacionadas, en la perspectiva de un tejido de tres hilos: 1) El modelo alimentario y de salud de la población; 2) El modelo de aprovechamiento y conservación de la naturaleza; y 3) El modelo de distribución de ingreso y acumulación de capital. Otros problemas territoriales existen, pero el desafío en esta oportunidad consiste en extraer lo esencial de la realidad y examinar las interacciones entre sus partes como una estrategia de focalización y a partir, en todo caso, de la base conceptual y teórica subyacente.
El tercero, es la Matriz de Actores Estratégicos a través de la cual se permitirá identificar las demandas de acción pública, los mecanismos para la acción y los escenarios de intermediación, es decir la gobernanza del territorio Agro. La matriz de actores estratégicos contiene en el eje vertical las preguntas guía de la entrevista semiestructurada, y en el eje horizontal los grupos de actores estratégicos. Se necesita hacer una prueba piloto atendiendo especialmente la comprensión de las preguntas y la consistencia en relación con la integridad de la entrevista. Un desafío que está presente es el de lograr identificar la mayoría de actores estratégicos; sin duda en el desarrollo del proceso, “la arqueología de actores” verdaderamente estratégicos toma tiempo y atención. El cuarto componente, es el de formación a través de tres estudiantes uno en programa de doctorado, otro en programa de maestría y otro en pregrado.