A los 12 años Wilson Olaya Hernández era estudiante en un colegio del municipio de Tausa, Cundinamarca. Todos los días le tocaba caminar desde su casa hasta el colegio, caminaba una hora cada trayecto, pero un día su vida cambió por completo cuando llegó a su casa, su padre, minero de profesión, murió en un accidente en la mina. Fue entonces que aquel niño de la vereda Rasgatá Alto, se dio cuenta de que tenía que ayudarle a su madre, no solo con ser el guía de dos hermanos menores, sino tenía que debía ayudar económicamente con los gastos.
En pocas palabras, ser el hombre de la casa. Su madre, sin poder soportar el dolor que le ocasionó la pérdida de su esposo, decidió dejar la vida en el campo e ir a vivir al pueblo buscando un nuevo futuro y un nuevo subsistir para su familia. Wilson, al asumir el cargo de coequipero de su madre, se vio enfrentado a tener una vida poco común para un niño de su edad, no tenía mucho tiempo para jugar o para tener una novia, como dicen popularmente, le tocó madurar a la fuerza.
Su situación lo llevó a formar un carácter humilde y responsable, siempre buscando con empeño y verraquera que su familia estuviera bien y tuvieran que comer cada día. “Éramos vendedores ambulantes. Metíamos todo en una maleta y llevábamos la mercancía, recorríamos de a tres municipios, viernes, sábados y domingos, caminábamos a ver qué podíamos vender.” Sus principales compradores eran las clases trabajadoras, como mineros, agricultores, campesinos, obreros y conductores de transporte público, que años más tarde, serían los principales oyentes de TRadio. La facilidad de palabra que tiene Wilson ayudó mucho a las ventas, pero gracias a ello, fue que él empezó a girar en torno al mundo sonoro.
Trabajando en Crecer Stereo, año 2010.
Después de tres años de haber iniciado el negocio de venta de ropa, la familia Olaya se muda al municipio de Ubaté, en donde abrieron una tienda de ropa. En ese tiempo Wilson cursaba décimo grado, con su facilidad de palabra y elocuencia, siente que la radio tocó a su puerta.
“Wilson, usted que siempre está ayudándonos con el sonido y presentando los temas culturales, ¿Por qué no se le mide a la emisora del colegio?”, alguien le preguntó. “Yo le dije que sí, pero eso fue más como un hobbie, porque la emisora se emitía solo en los descansos, que eran de 40 minutos, entonces no era mucho el esfuerzo”, recuerda haber contestado.
“Transmitíamos saludos de los chicos de unos a otros, información del colegio en general, música instrumental y relajante durante las clases. Eso era lo que se hacía en la radio del colegio.”, concluye. A Wilson lo apasionaba la radio, él no quería ser locutor como profesión, pero la vida da muchas vueltas y le mostró un camino para seguir y así llegar a donde está ahora. “Muchas veces las cosas que uno quiere no le salen por alguna razón”, recuerda, y para Wilson esa fue una señal para encaminarse a la radio.
Recibiendo condecoración en el concejo de Cundinamarca.
Al estar a cargo de la radio del colegio, creó una amistad con Crecer Stereo, radio comunitaria líder en Ubaté en ese entonces. Le ofrecían trabajos temporales los fines de semana colaborando y aprendiendo a hacer lo que se hace en una emisora de verdad, como también reemplazando a algunos locutores que se ausentaban el fin de semana, sin embargo, él seguía con la idea de estudiar algo encaminado a la Ingeniería de Alimentos, pero ¿Cómo la vida le mostró a Wilson que lo suyo es la locución? Apenas se graduó del colegio, su madre le dijo: “Hasta aquí llegó el estudio, yo no tengo para pagarle una universidad.” Como había trabajado y estudiado toda su vida, para Wilson no fue tan difícil trabajar los fines de semana en Crecer Stereo y estudiar varios técnicos en alimentos.
Un día, esperando que lo contrataran en algún lado para ejercer en lo que había estudiado, le llegó una buena noticia, Crecer Stereo lo había recomendado por Hugo Alejandro Guzmán para trabajar de tiempo completo en la emisora Manantial FM Stereo en el municipio de Sutatausa. “Wilson tiene una voz muy comercial, sabe cómo hablarle a la gente y es un hombre lleno de ganas y verraquera para salir adelante, esa fue la razón para que yo lo recomendé con tan solo seis meses de experiencia en la radio, en él vi lo que pocos locutores tienen hoy en día, el de informar con la verdad”, dijo Guzmán. Wilson se ganó el puesto en la emisora, él ejercería como director y locutor principal.
Llegó entonces un tornado de pensamientos a su cabeza, pensamientos que se convertirían en realidad, lo que empezó como un hobbie, evolucionó empíricamente, sería la oportunidad de que su vida estuviera no solo acompañada por un título universitario, sino por tener la idea de crear una emisora en su pueblo de origen, y para su pueblo de origen. Entró a estudiar Comunicación Social y Periodismo en la UNAD. La vida le mostró que eso era lo que tenía que hacer, igualmente, mientras trabajaba, estudiaba, y la gran ventaja era que mientras estudiaba la teoría, la practicaba y la aplicaba en la emisora, así fue durante toda su carrera. Manantial Stereo fue totalmente renovada por Wilson, se crearon programas para la comunidad, entrevistas con políticos, espacios culturales, mostrando unos buenos resultados.
Programa Tardes Crossover con el Dj Julián Alarcón.
Wilson siempre pensaba para dónde iría, pero nunca olvidó de dónde venía, idealizó como proyecto de grado el crear una emisora pública para su lugar de origen, pensando en toda la gente de las veredas lejanas que no podían informarse, simplemente porque las coberturas de varias emisoras no llegan a donde están, o, simplemente, porque no llega la señal de celular, gente que va una vez cada mes al municipio a vender sus productos o a informarse de acontecimientos del país por medio de terceros.
Wilson cuenta que era solo una idea, pero que él estaba decidido a realizarla, el único problema, como en cualquier inversión, era el dinero, él no tenía la capacidad de abrir una emisora financiada por su bolsillo. Tuvo la suerte, tiempo atrás, de entrevistar a el alcalde de Tausa cuando estaba haciendo campaña, lo contactó y le contó la idea que tenía, el alcalde, emocionado, respondió: “Si sale, hágale Wilson, la alcaldía la financia”, y así fue, Wilson renunció a Manantial FM Stereo, esperanzado por la creación de su nueva emisora.
Fue en diciembre del año 2014, para ser exactos, el día 31 del mes, cuando Wilson habló por primera vez al aire en la emisora de su autoría. “Nos dieron la frecuencia 102.4, pero no teníamos equipos, entonces, en ese proceso de conseguirlos, nos tocó unos alquilados, con sillas prestadas y con unos escritorios que habían adquirido para el concejo del municipio. Nos dijeron que los cogiéramos, allí fue donde coloqué la primera consola.” El impacto en la sociedad tausana fue grande, apenas Wilson abrió su boca pronunciando el número de contacto, la gente empezó a llamar para agradecerle por la ayuda comunicativa dentro del municipio, ya que la emisora cubre más del 90% del territorio. Con el tiempo, la ayuda comunicativa no solo llegó a Tausa, el municipio está ubicado a 2.900 metros sobre el nivel del mar, sino que la emisora cubre más de 30 municipios de los departamentos de Cundinamarca y Boyacá.
Equipo de trabajo TRadio 102.4.
Por otro lado, el colega y compañero de trabajo Hugo Cubillos, que cuenta con una trayectoria de 25 años como periodista, atribuye el éxito de la emisora a la personalidad de Wilson, pues lo califica como un hombre honesto frente a su trabajo. Lo admira y lo respeta como su jefe, puesto que es una persona con profundos valores éticos. “Él es como pocos, es un referente de muchos muchachos, que como él lo hizo, tendrán que luchar día a día para cumplir sus sueños”.
Wilson continúa escribiendo el epígrafe de su vida, contenedor de tiempos de esfuerzo y superación, hace poco fue condecorado por la Asamblea de Cundinamarca por su profesionalismo, trabajo y sacrificio. Ahora es padre y esposo, esperando que algún día, si se dan las cosas, su hijo trabaje codo a codo con él haciendo buena radio. La creación radiofónica de un niño nacido en el campo es hoy una de las emisoras más escuchadas en la provincia de Ubaté y parte de Boyacá.