Pinzón destaca la existencia de un descontento generalizado en la población, más allá de los activistas políticos y sindicales. Se cuestiona la estrategia del gobierno y se señala la rotura de las relaciones entre pueblo y gobierno.
Además, menciona la preocupación por el uso excesivo de Twitter por parte del presidente para comunicar decisiones administrativas y se critican algunas de sus posturas en temas internacionales. Resalta la importancia del Día del Trabajo y se cuestiona la intervención del presidente en las celebraciones sindicales.También hace un llamado a los líderes políticos para evitar un mayor deterioro institucional en medio de la crisis política presente.
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