Al igual que muchos países europeos, desde finales de los años 70 Japón ha mantenido una tasa de crecimiento demográfico por debajo de lo necesario para reemplazar su población, situación que se ha agravado desde la crisis financiera que atravesó el país a finales de los años 80.
A pesar de que los problemas y las ramificaciones sociales y económicas a las que esta crisis puede llevar han sido señalado por diferentes analistas desde hace varios años, el gobierno japonés ha hecho poco para mejorar la situación, en parte debido a la naturaleza conservadora de la sociedad japonesa y a que muchas de las posibles soluciones a la crisis demográfica significarían un sacrificio económico a corto plazo y una reestructuración del sector productivo del país e incluso su cultura.
En el siguiente artículo, se hace un breve recuento de los inicios de la crisis demográfica nipona y se resaltan los efectos que esta ha tenido y podría tener en los próximos años sobre la tierra del sol naciente.
pdficon.jpg