18 años tras la muerte de Saloth Sar, mejor conocido como Pol Pot, Camboya, el pequeño Estado del sureste asiático ha hecho cambios monumentales a su imagen como destino turístico. Los innumerables templos budistas e hinduistas, las hermosas playas vírgenes al sur del país e incluso los antiguos campos de reclusión usados durante la dictadura de Pol Pot se han convertido en grandes atractivos para los extranjeros que desean conocer mas sobre la cultura, la historia y las maravillas naturales de la región.
En este artículo Sandra Abreu Ortiz, empresaria de la industria del turismo, señala los lugares y actividades que Camboya pone a disposición de los extranjeros que estén interesados en conocer el país y de paso nos regala unos tips de viaje muy útiles a la hora de llegar a esta gema del sudeste asiático.