Presencia en el V Seminario internacional de inteligencia estratégica y prospectiva

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Presencia en el V Seminario internacional de inteligencia estratégica y prospectiva
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Sábado, Septiembre 5, 2015
Desarrollo y paz
Asistimos el segundo día, titulado "Construcción de paz", del V Seminario internacional de inteligencia estratégica y prospectiva.
Tomada de http://www.eluniversal.com.mx/autor-opinion/articulistas/mauricio-meschoulam

El pasado jueves 3 de septiembre del año en curso, El Observatorio de Construcción de Paz de la Universidad Jorge Tadeo Lozano asistió a la quinta edición del Seminario Internacional de Inteligencia estratégica y prospectiva organizada por el Centro de Inteligencia Prospectiva de la Policía Nacional de Colombia, la cual tuvo como temática central la consolidación de la Seguridad Pública para la construcción de paz en un país en proceso de normalización.

El Observatorio atendió al segundo día de este Seminario, en donde se trató específicamente los temas de Construcción de Paz. En este día se presentaron los académicos Mauricio Meschoulam de México, el italo-mexicano Paolo Pagliali, el uruguayo Ricardo Andrés Fraiman Borrazás, Melina Ingrid Risso de Brasil y el profesor Eduardo Guerrero de México.

El primer panelista en el día fue el internacionalista mexicano Mauricio Meschoulam, quien expuso las temáticas de la Reconciliación y las pedagogías para la paz. Para este profesor de la Universidad Iberoamericana y Doctor en políticas públicas con especialización en terrorismo, mediación y paz, es esencial que la paz no sea entendida únicamente como la ausencia de violencia; la paz es un concepto integral que debe ser comprendida de manera amplia y detallada, y debe ser estudiada de igual forma que se ha estudiado la violencia y sus causas en la mayoría de centros de pensamiento del mundo.

Ahora bien, para entender los procesos de paz y su construcción, es relevante conocer en su totalidad lo que abarca el concepto. En primera medida no se debe especificar la paz como un simple acto de no violencia, sino entender otros factores que explican y nutren el verdadero sentido de la paz. Dentro de estos se encuentran características tales como la justicia social, el bienestar tanto individual como colectivo, la equidad, el respeto por el otro, la verdad y las garantías de vida que cualquier grupo social debe tener.

Teniendo en cuenta esa construcción de la palabra paz, Mescholaum hace referencia a una investigación realizada por el Instituto para la Economía y la Paz (IEP), en donde se argumenta que la paz está compuesta por ocho pilares, los cuales se manifiestan como condiciones necesarias que existen al interior de las sociedades más pacifistas en el planeta. Los pilares son los siguientes: Gobiernos con buen desempeño, distribución igualitaria de recursos, distribución libre de información, condiciones óptimas para el surgimiento de empresas, alto nivel de capital humano en cuanto al desarrollo y la educación, igualdad de derechos y reconocimiento del otro, bajos niveles de corrupción, y por último la existencia de buenas relaciones exteriores.

La corrupción en esta lista, es uno de los elementos que mayor relación tiene con la gestación de paz, ya que a mayor corrupción, los índices de paz tienden a bajar, y para ejemplificar esto explica el contexto de su país de origen, México. Para que exista paz se deben erradicar problemas estructurales como la pobreza y la desigualdad, se debe abrir un amplio espectro que se componga de aspectos políticos, económicos, sociales y culturales que involucre y estructure una educación para la paz.

Como conclusión de este panelista, creo que es pertinente mencionar una frase que resume su mensaje a grosso modo: “El día en que no exista violencia, simplemente habrá una ausencia de violencia, no necesariamente nacerá la paz”.

A continuación se presentó el Doctor Paolo Pagliai de la Universidad del Claustro de Sor Juana de México. Pagliali resaltó la importancia del rol activo que debe asumir la sociedad civil en el cambio de instituciones y de cultura social con el fin de construir una sociedad más participativa e influyente en el Estado. La violencia debe ser confrontada desde esta transformación cultural, que se debe fortalecer con un cambio de valores y una cultura de responsabilidad y legalidad, cultura que debe nutrirse de un ambiente más colectivo que individualista.

Pagliai es a su vez el Director del Centro de Estudios sobre la Paz y la Memoria Pier Paolo Pasolini, en donde ha desarrollado una serie de investigaciones y análisis sobre la memoria histórica y la justicia; este profesor argumenta que sin memoria no hay justicia y sin justicia no existe nada, primero se debe construir memoria para existe justicia.

Posteriormente el académico uruguayo Ricardo Andrés Fraiman Borrazás, expuso el tema de Educación para la paz, en el cual recalcó la importancia de forma ciudadanos de paz, ya que la simple firma de unas negociaciones de paz para poco servirá si la sociedad no está preparada para reproducir paz. En ese contexto, la promoción y cultivación de valores de paz es determinante para llevar a cabo este objetivo, en el cual también es importante “educar” las instituciones, las cuales se encargaran de gestionar una serie de caminos y herramientas que estructuren la paz.

La cuestión de las penas punitivas y el reclutamiento en las cárceles, hacen parte fundamental de la educación para la paz, ya que se debe repensar la forma en la cual se quiere impartir justicia en una situación de posconflicto, y este tipo de castigos severos lo único que genera al final es la reproducción de violencia.

Respecto a lo anterior  es necesario la intervención y construcción de una educación para la paz que abarque todas las dimensiones de la vida del individuo, tanto psicológicas, sociales, físicas y familiares, entre otras, para la transformación del futuro y la consolidación de un proyecto de paz. En este sentido, es preciso tener en cuenta los procesos y expectativas de vida que cada individuo moldea y facilitar la estructura de oportunidades para muchos jóvenes que aporten en la construcción ámbitos de paz.

Acto seguido la profesora Melina Ingrid Risso, experta en el tema de la prevención de violencia, se refirió a la convivencia social y los desafíos de la misma para una sociedad en posconflicto. El crecimiento demográfico en las ciudades y los fuertes movimientos poblacionales que se presentan del campo a la ciudad, han creado unas nuevas dinámicas sociales que son claves para entender la convivencia en la contemporaneidad.

Estos desplazamientos demográficos, son la cuna de una seria de desigualdades y diferencias que se ven reflejados en los índices de violencia en cada una de estas ciudades, situación que la académica brasilera ve con frecuencia en muchas ciudades grandes latinoamericanas. De igual manera el crecimiento de estas grandes urbes implica el aumento de las actividades ilegales, que en muchas ocasiones terminan siendo el núcleo del crimen organizado y más violencia.

En el tramo final, se enfatizó acerca de la prevención de violencia y la importancia de la misma en un país como Colombia. Risso señala que las sociedades que emergen de conflictos armados siempre traen secuelas, y que en ese sentido la aplicación de la cadena de justicia – impunidad y reconciliación, es determinante para que no se reproduzcan más conflictos una vez se haya llegado a un acuerdo de paz

Dentro del marco de estrategias para la construcción de paz, es imprescindible  la innovación de formas diferentes de concebir el mundo y sus dinámicas, ya que la diferencia y la búsqueda de beneficios individuales crean disenso dentro de los diferentes grupos sociales propinando en muchos de los casos violencia. Es de este modo que la normalización de los usos violentos para solucionar diferencias se convierte en una constante dentro de las dinámicas de socialización y de relación con el otro. Con base en esto y en estudios sociales sobre la violencia, se han creado estrategias para la paz que logren transformar las dinámicas de relación violentas hacia una cultura de interrelación pacifica basada en la participación activa y el colectivismo.

Finalmente, el protagonismo que deben desempeñar las instituciones colombianas colombiana debe ser de alta relevancia en el contorno regional, ya que como destinatarios de educación y legalidad tienen la misión de usar la herramienta de la paz de una manera efectiva y contundente para poder permear cualquier ambiente que incite la violencia. El proceso de integración en Colombia debe ser un eje fundamental para romper las brechas culturales y sociales existentes en el país, para de esta forma quitar otra barrera en el camino para la paz.

 

Escrito por Juan Camilo Jaramillo
Polítologo Pontificia Universidad Javeriana

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