Beatriz está en la Universidad Jorge Tadeo Lozano desde el 2011 como profesora de cátedra y en 2013 se ganó la convocatoria para trabajar en fotografía. “Pertenecer a la escuela de Artes y Diseño permite una formación muy interesante porque en ese momento -2013- el programa de fotografía se nutrió de un montón de herencias que tienen que ver con el pensamiento de la imagen, el arte y la creación”.
Ella es artista plástica de la Universidad Nacional. Se caracteriza, entre otras, por su sonrisa y la calidez al tratar a las personas. Sigue acomodándose a su nueva oficina - módulo 18-, pero tiene toda la disposición para este nuevo cargo lleno de retos: dirigir el área de Artes Plásticas y Fotografía, que también está compuesta por la maestría en Creación Artística.
Comenta que existen dos grandes motivaciones. "La primera, creer en el área académica porque hay una diversidad de asuntos que manejamos en lo cotidiano que son un estímulo enorme como reto. Segundo, el compromiso de los profesores, sus áreas y objetos de estudio. Quiero ayudar a sacar adelante nuestros proyectos porque creo que el nivel de pertinencia y pertenencia es muy alto en todo el equipo”.
Expresa que es difícil alejarse un poco del mundo de la docencia para dedicar más tiempo a temas administrativos y de organización, pero a la vez lo ve como un relevo necesario para entender cómo gestionar de la mejor manera posible para que los sueños del área puedan volverse realidad.
La dinámica cotidiana de la Universidad es vertiginosa, menciona, "pero el deseo es llegar a un punto de equilibrio en el que las cosas fluyan. Que lo administrativo no robe el objetivo fundamental que es la pedagogía y la educación. Soy una convencida de que un país como el nuestro requiere acciones contundentes desde la educación".
A corto y largo plazo hay proyectos que deben consolidarse y generar una reflexión pedagógica y didáctica que tenga relación con el contexto y el entorno. "Todos los proyectos están atravesados por un compromiso social, no solo con los estudiantes, también con el contexto. La proyección social es primordial en nuestros planes de trabajo y programas académicos".
Durante la entrevista, también hablamos de los artistas que hoy en día pisan las aulas luego de la pandemia y que son más conscientes de sus emociones y de la salud mental; y que tienen una mayor sensibilidad desde el punto de vista de las artes.
Acá se ha consolidado un equipo humano fantástico, menciona Beatriz con una sonrisa. El perfil del estudiante de Utadeo tiene un compromiso arraigado y una gran responsabilidad, al menos en esta área, "uno no decide casualmente estudiar artes o fotografía. Son decisiones de una gran convicción, hay gran diversidad de puntos de vista y deseos en esos estudiantes. Acá cuentan con un gran acompañamiento y quiero resaltar la importancia de los profesores de cátedra en las tres áreas académicas. Estamos apoyados en ellos, son grandes coequiperos y se puede contar con ellos".
Una de la decisiones más afortunadas que tuvo en la vida fue elegir la fotografía. Tiene amores profundos por este tema. Es apasionada de la palabra, la literatura, el cine y la música. "Somos seres sensibles y perceptivos a la emoción estética. Me encanta viajar y conversar. Valoro mucho tener la oportunidad de tomarme un café, aprender y escuchar porque siento hemos perdido espacios de conversación. Pienso que el encuentro es más efectivo a través de la palabra".