Virgelina Chará, líder comunitaria y defensora de los derechos humanos, ayuda con su labor en la Asociación para la Mujer y el Trabajo (Asomujer y Trabajo) a familias desplazadas y víctimas de la violencia armada en Colombia. Originaria del departamento del Cauca, desde muy joven tuvo que enfrentar la violencia y el desplazamiento forzoso. A principios de 2003 llega a Bogotá huyendo de las amenazas de los paramilitares y con sus familiares y otros líderes sociales comienza a dar forma a Asomujer y Trabajo, que finalmente pudo ser legalizada en diciembre del 2006. Actualmente, en Bogotá, la Asociación tiene procesos organizativos con mujeres en sectores como Sierra Morena, en Ciudad Bolívar; Quiroga, Diana Turbay, Nueva Esperanza y San Marcos, en Rafael Uribe Uribe; Villa Rosita, en Usme; Rincón de Suba, en Suba, y con los vendedores ambulantes de la Plaza España, en Los Mártires. En estos sectores, la organización dicta capacitaciones, charlas, crea unidades productivas y ayuda a las víctimas a vender sus productos, además de los cual promueve procesos de formación social y política. Fue propuesta para la nominación al Premio Nobel de Paz en 2005.
En el escenario de Expopaz, el Observatorio tuvo la oportunidad de hablar con Virgelina sobre su trabajo por la paz y su visión de las políticas públicas en construcción de paz en Colombia
Observatorio Construcción de Paz: Doña Virgelina, ¿en qué consiste su iniciativa?
Virgelina Chará: la iniciativa nuestra consiste en todo el tema de la recuperación del legado ancestral de las comunidades negras. En todo el tema de levantar la autoestima de las mujeres que han estado en una crisis emocional por el rompimiento del tejido social, familiar y político que han tenido por el impacto que les dejó el desplazamiento, el abuso sexual, la prostitución, las desapariciones o el reclutamiento. La apuesta es una apuesta política puesta en marcha, una iniciativa desde las víctimas, desde nuestra organización y desde los conocimientos de las víctimas. Porque no hemos tenido ningún apoyo económico, ha sido auto-sostenida con los recursos de las mismas compañeras que el uno pone una cosa y el otro coloca otra y ahí va surgiendo la iniciativa.
OCP: ¿en cuántas regiones están presentes?
VC: estamos en 17 departamentos; nosotros no hablamos de región, hablamos más de departamento porque si hablamos de región, tomaríamos por ejemplo Valle, Cauca, Nariño, Chocó y Caquetá, pero resulta que una familia viene es de un departamento, un municipio, una vereda, entonces es por eso que no lo tenemos como una región sino como un departamento y un municipio de un departamento.
OCP: ¿con cuáles entidades, asociaciones u organismos del Estado han trabajado ustedes o planean trabajar?
VC: con el Estado no hemos trabajado en el tema económico; por ética, no le hemos aceptado recursos al gobierno saliente; primero porque cuando uno recibe un peso, lo condicionan. Hemos sido autónomos, por eso hemos mostrado el mini catálogo de los productos que ofrecemos; nosotros vendemos refrigerios, almuerzos, mermeladas. Con el gobierno nos sentamos es a trabajar el tema de las políticas públicas que afectan los derechos de las víctimas, los derechos de las mujeres y los derechos de la sociedad civil y específicamente como grupo étnico a la población negra, cualesquiera raizal y afrocolombiano.
OCP: específicamente en el tema de políticas públicas, ¿cuáles han sido las temáticas que ustedes le han planteado al Gobierno como prioritarias para la formulación de estas políticas?
VC: nosotros trabajamos desde la cooperación internacional que es el proceso Londres- Cartagena, el G-24, proceso que es de Gobierno, sociedad civil y comunidad internacional donde están todos los países que firmaron la declaración de Londres en el 2003 cuando Colombia fue declarado el segundo país en violación de derechos humanos, entonces nosotros hacemos parte de ese proceso. A través de ese proceso tripartito, trabajamos en los bloques temáticos de verdad, justicia, reparación y el derecho de no repetición. Fuimos unos de los que exigimos que esa ley se cayera porque iba en contra de los derechos de las víctimas y favorecía a los victimarios y seguía afectando los derechos.
En el tema de las políticas públicas hemos incidido para mejorar la atención de las víctimas del desplazamiento, también hemos incidido en el tema de la democracia que es la separación de la justicia, el respeto a la rama judicial y el respeto a los derechos humanos; hoy ya escuchamos al Vicepresidente diciendo que se va a trabajar una política pública de derechos humanos como herramienta para poder exigir el cumplimiento de los derechos de las comunidades y del pueblo colombiano en general.
El ACNUR, nos ha venido apoyando desde el 2006 hasta el momento en la elaboración de la recomendación de la política pública con enfoque diferencial para la población negra en desplazamiento y en confinamiento; fuimos los convocantes a la audiencia para la problemática de la población negra, de los consejos comunitarios, los territorios colectivos, la población desplazada urbana, toda la desocupación y despropiación del territorio, la iniciativa que tenemos hoy de la reparación histórica porque aquí se habla en este momento de la reparación del dos mil para acá pero no se habla de la reparación de los años cuarenta.
En Colombia cualquier colombiano puede decir que es desplazado porque los años cuarenta fue una época de desplazamiento y expropiación masiva; todas esas masacres y violaciones que se cometieron no solamente con los negros, fue con los indígenas, con los mestizos, con los blancos. Nosotros estamos diciendo que debe haber una reparación histórica y que nos cuenten que paso con toda esta gente. De eso está hablando el gobierno hoy, la colocamos desde mi organización porque soy una convencida que yo no la veo pero mis nietos o mis tataranietos tienen que ver esa reparación histórica y todo eso es política pública.
OCP: ¿cuáles son los retos y expectativas de la organización frente a la feria y frente a los retos institucionales que tienen como tal?
VC: el reto de Asomujer y Trabajo en sí, en estos momentos, es fortalecer todas las iniciativas económicas que tiene tanto la organización como otras que hacen parte de Asomujer y Trabajo porque tenemos una red de cincuenta organizaciones y con lo que produce esa red vamos a abrir un centro de comercialización y en ese sitio debemos colocar todos nuestros productos y la apuesta es que si queremos colocarlos, las organizaciones en sus sitios se deben fortalecer tanto en lo económico como en lo político, social y cultural.
Si nosotros logramos ese mínimo con cincuenta organizaciones estamos incidiendo un poquito en la paz, porque la paz no sólo tiene que ver con armas sino que también en lo económico; no se puede hablar de derechos humanos con hambre, entonces así mismo no se puede hablar de paz con hambre, con desempleo, con una extrema pobreza a la que está llegando la gente. No se puede hablar de paz cuando se están presentando violaciones, cuando se presionan a las mujeres para que ejerzan la prostitución, cuando están desapareciendo colombianos y colombianas. Tú tienes que hablar de paz con la parte cultural, tú tienes que hablar de paz con la solución económica, con la solución política, con la inclusión, la participación; para poder decirle a alguien que deje las armas debe presentársele una alternativa.
OCP: supimos que usted fue nominada a un premio de paz, ¿nos podría comentar un poco de la experiencia?
VC: En el 2003 en Suiza hubo una iniciativa de una postulación a premio Nobel de Paz a iniciativas y a mujeres que teníamos unos procesos allá escondidos. El Premio Nobel de Paz tenía en este momento cien años y nunca llegaba a las comunidades ni a las mujeres; siempre quedaba en lo científico, en los grandes y no en la clase menos favorecida. Esa iniciativa duró dos años mientras se recogían las hojas de vida a nivel mundial; aquí en Colombia fueron treinta y cinco hojas de vida que se pasaron para la iniciativa y de Colombia fuimos doce mujeres nominadas en ese proceso. Ese es un proyecto también que nosotros estamos dándole vida con las otras compañeras postuladas. Aquí estamos con Beatriz que es de Florencia-Caquetá con la que estamos trabajando aquí en nuestra organización para abrir la sede de las doce mujeres de Colombia, para enero ya tendremos ese espacio abierto donde se pueda tener la galería de las mil mujeres del mundo nominadas, para que el país nos conozca.